
“Mal entendido”: confusión y dudas en el Gobierno respecto del decreto de Alberto Fernández sobre la custodia presidencial
El gobierno de Javier Milei quedó envuelto en un confuso episodio respecto de la futura vigencia del decreto que firmó Alberto Fernández el 9 de diciembre pasado, cuando restaban menos de 24 hor...
El gobierno de Javier Milei quedó envuelto en un confuso episodio respecto de la futura vigencia del decreto que firmó Alberto Fernández el 9 de diciembre pasado, cuando restaban menos de 24 horas para que dejara el poder, en el que estableció que la seguridad de los expresidentes y su familia quedará bajo la órbita de la Casa Militar y que el Estado les pagará la custodia incluso si decidieran residir en el exterior.
El ida y vuelta alrededor de la sucedido tomó mayor dimensión luego de la respuesta del exmandatario el mediodía de este jueves en el que le apuntó a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a través de una serie de mensajes en la red social X, en el que hizo referencia incluso al atentado sufrido por la vicepresidenta, Cristina Kirchner. Se trata de un punto central de lo sucedido alrededor del decreto cuestionado y la motivación de introducir cambios, respecto de la cabeza de la que dependen las custodias de exmandatarios y vices.
Ayer, la ministra de Seguridad acompañó inicialmente el comunicado con capturas de imágenes del documento de la presunta derogación. No obstante, la propia funcionaria borró el tuit poco después de hacerlo público. La sugestiva marcha atrás provocó la reacción airada de Fernández, quien este mediodía defendió los cambios que estableció en la custodia presidencial, con el argumento de que la seguridad de los exmandatarios no podía estar en manos de Bullrich después del intento de asesinato de Kirchner y las supuestas vinculaciones en ese hecho de Gerardo Milman, excolaborador de la líder del PRO y señalado por el kichnerismo. Por eso Fernández justificó el pase a la órbita de Casa Militar y la Secretaría General de Presidencia. Además, en el extenso hilo de X, negó que tenga pensado residir en el exterior e irse a vivir a España, pese a que él mismo dijo tener previsto dar en ese país clases universitarias.
Vía la red X Fernández cruzó a Bullrich al sostener: “El decreto que yo firmé no alteró en absoluto el régimen de custodias otorgados para presidentes y expresidentes y sus familiares directos que cuenta con décadas de vigencia”. Agregó: “No he reclamado ningún trato especial con la custodia. La misma me fue dada directamente por lo que emana de las normas vigentes que, repito, llevan muchos años”.
En el entorno de Bullrich aseguran que la decisión del Gobierno es avanzar con la derogación del decreto 735/2023 que firmó Fernández antes de irse de la Casa Rosada. “No hay vuelta atrás. Es una decisión política”, sostuvo una alta fuente del Ministerio de Seguridad. Quienes frecuentan a Bullrich afirman que “no hay impedimentos” por parte de Milei para retrotraer el esquema de custodia presidencial al estado anterior del decreto de Fernández. Dicho de otro modo: aseguran que la seguridad de los expresidentes, vicepresidentes y familiares volverá a estar bajo control de Bullrich.
En esa cartera argumentan que borraron el mensaje de Bullrich en redes sociales debido a que hubo un “mal entendido” y que los equipos de la titular de Pro se apresuraron a comunicar una medida que aún no había sido firmada por el Presidente ni publicada en el Boletín Oficial. Interlocutores frecuentes de Bullrich descuentan que el primer mandatario oficializará la decisión en los próximos días. “No hay ningún problema. Va a salir. Se apresuró ”, dicen cerca de la ministra.
Sin embargo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, evitó confirmar esta mañana si Milei estaba dispuesto a derogar el decreto de Fernández. “No tengo precisión”, remarcó ante la consulta de la prensa en Balcarce 50. LA NACION indagó a fuentes ligadas a la Secretaría General de la Presidencia y el jefe del Estado respecto de la futura vigencia de la norma que dispuso Fernández, pero hasta al momento no hubo una respuesta oficial.
Entre los bullrichistas dicen desconocer un presunto pedido de la exvicepresidenta Cristina Kirchner a Milei para que su custodia no esté a cargo de la titular de Pro. “Cristina no determina la política pública. Es una ciudadana”, dicen. En sus misivas, Fernández apuntó al cambio de órbita de la protección por el vínculo entre Bullrich y Millman, a quien vinculan al intento de asesinato de la vicepresidenta. En el kichnerismo no niegan que el punto jugó un rol importante en la decisión, aunque evitan mayores precisiones. En tanto Fernández fue explícito y apuntó al tema sin sutilezas.
En el bullrichismo, con duras críticas a las modificaciones que estableció Fernández, consideran que los expresidentes, vicepresidentes y sus familias no pueden tener custodia “de por vida” si deciden residir en el exterior que sea solventada por el Estado. Aníbal Fernández había dicho que también Macri es acompañado a sus viajes por su rol en la Fundación FIFA, algo que recordó el saliente Fernández este mediodía. No obstante, los colaboradores de Bullrich consideran que no corresponde que se sostenga la custodia en caso de que un expresidente decida irse a vivir a otro país transitoriamente.
“Nosotros no les vamos a firmar la autorización”, advierten, respecto de los efectivos de la Policía Federal asignados a División Custodia Presidencial ante el eventual viaje de Fernández o Cristina Kirchner para vivir en el exterior.
Fernández tiene previsto dejar el país en las próximas horas. Primero irá rumbo a Turín, para una disertación y de ahí recalará en Madrid, España, donde se supone que pasará los próximos meses y desde donde intercalará viajes hacia y desde Buenos Aires. Es lo único seguro en un mar de idas y vueltas.