Cuando la alumna, de 17 años, bajaba la escalera, se le acercó uno de los profesores de matemáticas de la escuela y le espetó: “Hola linda, que linda que estás, que lindas tetas tenés”. Hubo otros comentarios del docente, pero la chica no los pudo recordar, después. Quedó en shock. Su padre decidió hacer la denuncia y, en las últimas horas, el acusado fue condenado por acoso sexual, recibió una pena de prisión en suspenso y fue inhabilitado para dar clases durante un año.

Así lo informó el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad. La investigación comenzó tras la denuncia del padre de la víctima. Todo sucedió en una escuela secundaria del barrio de Parque Patricios.

El fiscal Adrián Dávila, a cargo de la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas porteña N° 36, especializada en Violencia de Género, “encuadró los hechos en la figura contravencional de acoso sexual doblemente agravado en razón de la minoridad de la víctima y la desigualdad de género”, según dijeron fuentes judiciales.

Desde el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad explicaron que, ante la gravedad del caso, Dávila rechazó la posibilidad de una suspensión del proceso a prueba (probation) y pidió la elevación a juicio de la causa.

“A pesar de la dificultad para establecer los hechos debido al estado de conmoción en que quedó la víctima, se lograron obtener diversas pruebas a través de declaraciones testimoniales, las cuales fueron presentadas en el juicio”, se informó en un comunicado de prensa.

Tras el debate, el juez Pablo Casas, condenó al profesor de matemáticas a la pena de ocho días de prisión en suspenso y lo inhabilitó para ejercer cargos docentes por un año. También le impuso reglas de conducta, como la prohibición de contacto con la víctima, con su padre y con otros testigos.

El docente, además, deberá realizar el taller sobre Violencias de Género del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires, y cumplir con la capacitación obligatoria prevista en la Ley Micaela.